DevOps y Agile son dos metodologías de desarrollo de software ampliamente utilizadas con el objetivo de entregar el producto final de una manera rápida y eficiente. No hay duda de que las organizaciones están interesadas en implementar estas prácticas, pero la mayoría de las veces hay una falta de comprensión cuando se trata de aprender las diferencias entre los dos tipos de prácticas.
Las metodologías Agile y DevOps son dos metodologías separadas pero estrechamente relacionadas que se utilizan en el proceso de desarrollo de software. Agile se centra en la filosofía y los principios de cómo se debe desarrollar y entregar el software, mientras que DevOps se centra en la implementación constante de código utilizando herramientas avanzadas y automatización. Tienen alcances y enfoques fundamentalmente diferentes, que es lo que los hace diferentes.
DevOps es un enfoque de desarrollo de software que enfatiza la comunicación, la integración y la colaboración entre los profesionales de TI para acelerar la entrega de productos. Es una cultura que fomenta la cooperación entre los equipos de desarrollo y operaciones, lo que permite una implementación más rápida y automatizada del código. Al alinear las operaciones de desarrollo y TI, DevOps permite a las organizaciones entregar rápidamente aplicaciones y servicios, aumentando así su velocidad de entrega.
El equipo de DevOps conceptualiza, especifica y describe las características y capacidades del producto o sistema que se está desarrollando. El progreso del proyecto se rastrea a un nivel granular, desde tareas individuales hasta múltiples productos, mediante el uso de metodologías de desarrollo de software ágiles como Scrum y tableros Kanban.
Según el plan, la fase de desarrollo abarca todos los aspectos de la codificación, incluida la escritura, las pruebas, la revisión y la integración. El equipo utiliza herramientas automatizadas para garantizar la calidad, la estabilidad y la productividad mientras innova rápidamente.
Esta etapa crucial implica la implementación de aplicaciones en entornos de producción. Los equipos establecen procesos claros de gestión de versiones con puertas automatizadas para garantizar la escalabilidad, la repetibilidad y el control, lo que permite una entrega fluida y segura.
Esta fase implica el mantenimiento, la supervisión y la resolución de problemas de las aplicaciones en entornos de producción. El objetivo es lograr cero tiempos de inactividad, lo que garantiza la fiabilidad y refuerza la seguridad y la gobernanza para una experiencia del cliente de alta calidad. Los problemas se identifican y corrigen de manera oportuna.
Scaled Agile Framework (SAFe) sigue siendo un método popular para escalar, como lo demuestra el 30 % de los participantes de la encuesta que lo utilizan. SAFe aborda los desafíos que enfrentan las metodologías ágiles tradicionales y ofrece mejores resultados para equipos de software grandes con cientos o miles de miembros. Sus principios promueven una mejor coordinación, coherencia y gobernanza, y brindan una visión clara de las prioridades y el progreso.
Garantizar que todos los equipos estén en línea con la visión de la organización y trabajen hacia un objetivo común es un aspecto central de SAFe. Esto es vital para que las organizaciones sigan siendo competitivas frente a mercados que cambian rápidamente, equipos distribuidos y otros desafíos. La alineación se logra comenzando en el nivel de cartera y fluyendo hacia abajo hasta la gestión de producción y soluciones y los propietarios de productos. Los compromisos claros se comunican a los equipos a través de los objetivos de iteración del producto y las metas de iteración.
La calidad debe integrarse en cada aspecto y paso del proceso de desarrollo, no considerarse como una ocurrencia de último momento. SAFe está estructurado en torno al flujo, la calidad de la arquitectura y el diseño, la calidad del código, la calidad del sistema y la calidad de la versión para lograr esto.
Los procesos claros y la comunicación abierta fomentan la confianza y la resiliencia dentro de las organizaciones. La transparencia facilita la resolución de problemas y la corrección de errores. Los equipos trabajan para cumplir con los compromisos a corto plazo y poner a disposición artefactos, documentos, objetivos y mediciones de progreso en todos los niveles dentro de la organización.
Este principio, extraído del manifiesto ágil, prioriza el software funcional sobre la documentación completa. La ejecución del programa es el resultado de los otros tres valores, con un mecanismo de calidad confiable que facilita la detección y corrección de errores y fallas, lo que garantiza una ejecución consistente del sistema.
Agile y DevOps son dos metodologías distintas que se utilizan a menudo en el desarrollo de software. Ambas tienen sus propias características y formas de trabajar.
Agile es un enfoque iterativo que prioriza la colaboración, la retroalimentación del cliente y los lanzamientos pequeños y rápidos. Su enfoque principal está en los cambios constantes. Por otro lado, DevOps es una práctica que combina equipos de desarrollo y operaciones para lograr pruebas y entregas constantes.
DevOps requiere un equipo relativamente grande, mientras que el enfoque Agile requiere un equipo pequeño. DevOps aprovecha los principios de cambio a la izquierda y a la derecha, en los que Agile aprovecha el principio de cambio a la izquierda. El área principal de enfoque de Agile es el desarrollo de software, mientras que DevOps tiene como objetivo proporcionar soluciones comerciales de extremo a extremo y una entrega rápida.
Además, DevOps se centra más en la preparación operativa y comercial, mientras que Agile se centra en la preparación funcional y no funcional.
Tanto DevOps como Agile proporcionan marcos y estructuras que pueden acelerar la entrega de software. En lugar de tener que elegir entre los dos, las organizaciones pueden beneficiarse de la utilización de ambas metodologías. Agile ofrece formas eficaces de organizar el trabajo, como a través de Scrum o Kanban, mientras que DevOps se centra en una cultura más amplia de entrega rápida y constante de software.
DevOps y Agile no deben considerarse como propuestas excluyentes, sino como metodologías complementarias que deben incorporarse a su entorno de desarrollo. Para un entorno de desarrollo altamente optimizado, es esencial considerar las características y los beneficios clave tanto de DevOps como de Agile.
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